domingo, 30 de noviembre de 2014

ASESINO

Es que no puedo, de verdad, no puedo con la justicia de este país. Llevo un par de días endemoniada, poseída casi. Hace dos días un "machote" ha matado a sus hijas porque quería hacerle daño a su pareja, a esa persona con la que compartió momentos de pasión y emoción, y que el paso del tiempo ha conseguido que todo se  convirtiera en odio y venganza. Un juez, eso dicen, así le llaman, decidió en un mal momento compartir la custodia de unas niñas con su propio verdugo, así de cruel, así de absurdo, un lobo cuidando de unas ovejas. La madre, su víctima acude a poner una denuncia por insultos y mentiras escupidas por una boca llena de odio y malas intenciones. No se le escucha, no hay sangre que demuestre los malos tratos, los insultos no han dejado marca en su piel, no le ha roto la funda que contiene su vida. Unos ojos sordos que no escuchan unas miradas de miedo. No aporta el suficiente terror, no hay moratones en su conciencia, nadie percibe su dolor. Me imagino su vuelta a casa, su impotencia, su incredulidad, su sensación de sentirse nada. Aquella tarde entregó a sus hijas a un lobo feroz, a una hiena rencorosa, a una bestia desalmada. Aquella tarde se convertiría en el principio del final de sus vidas, de ellas, de las tres. Las niñas nunca regresarían, ella ya tampoco.
El cobarde eligió un viaducto para estrellar su maldad, una barra de hierro para olvidar a sus hijas y un profundo odio para marcar a fuego y sangre a su pareja. Contranatura fue su venganza, descerebrado fue su pensamiento, de una cobardía absoluta, fue su brutal castigo. Le deseo fuego, dolor, sufrimiento, agonía. Lo maldigo y lo condeno. Lo odio y lo fusilo en mi pensamiento.
Un madre deshecha, un vacío suicida, un silencio de llantos. ¿Dónde están los que los protegerían, los que venden la libertad de las víctimas, los que mienten con ese manto falso de seguridad?. Estoy muy enfadada, lo reconozco, muy asqueada. Yo lo puedo estar, ellas no y eso es algo que me enfada. Buena noche, aunque hoy lo dudo. Va por vosotras, pequeñas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario